Baños de luna
acarician mi alma
esta luna blanca y esplendorosa
me mira tiernamente
como una madre hacia su hija
me abraza conteniendo mi tristeza
endulzando mis lágrimas
no cuestiona
no pregunta
ni aconseja
su mirada habla por si sola
Ella está siempre ahí
a veces enorme
otras se muestra un poco
o quizás incipiente
pero allí está presente
observa y
contempla sin razón
En esta noche extraña
mezcla de dolor y apatía
mi luna me mira amorosamente
deseando que sane mis heridas
y respire en paz
María
en algún momento
en algún lugar
No hay comentarios:
Publicar un comentario