lunes, 21 de octubre de 2019

SOLTAR

Tal vez lo más complejo sea soltar aquellos pensamientos que me enredan como una madeja pegajosa 
Que vuelven una y otra vez a meterse por los poros de mi piel sin dejarme disfrutar 
Son como moscas molestas que rondan una cuchara de miel 
Sanguijuelas que penetran la mente 
Poder Darme cuenta de esto 
No alimentarlos más 
Y decidir SOLTAR 
Exhalando sus marañosas garras 
Sacudiéndolos para que caigan 
Sin pretender explicar ni resistir ni convencer 
Soltarme de ellos 
Ya no quiero quedarme atrapada allí 
Y elijo poder avanzar hacia la bendita presencia de lo que si está sucediendo ahora 
Valorando lo que es y está siendo en este bendito instante 
Y nada más 

Maria
27/9/19

Ser madre

Hoy quiero honrar a cada mujer, cada ser que es madre, con la capacidad de maternar a un ser vivo.
Pues ser madre es acompañar, ayudar, dar una mano, alentar, animar, escuchar, estar cerca, contener, dar un abrazo, un consejo, estar en silencio, apoyar, mirar a los ojos, acariciar, mimar, amar.
Mi camino de ser madre no fue sencillo, más bien ha sido un camino fuerte que he atravesado, con muchos sinsabores, dolores, decepciones y frustraciones, incertidumbres, encrucijadas, desconciertos y misterios.
He y hemos atravesado muchos estudios y tratamientos donde chocamos con puertas que se cerraban en forma contundente.
Las voces del deseo se mezclaron con las de los mandatos, tejiendo una maraña de deberías que se incrustaron en mi mente y corazón, resultando difícil encontrar respuestas que alivien y den paz en el corazón.
He atravesado varias sinuosas y profundas crisis, personales y de pareja, que me llevaron a buscar el sentido de mi existencia en esta vida, mis proyectos y los de la pareja, sabiéndonos creadores de la vida, reformular mi vocación, como un llamado de mi Ser aullando en medio de la noche de luna llena, buscando claridad e iluminación.
Pero siempre tuve una certeza, nada sucede por azar, todo tiene un sentido y para encontrarlo el camino siempre es de adentro hacia afuera.
Así fue que me sumergí a bucear en las profundidades de mi alma, crucé ríos y montañas y formé parte de benditos círculos sagrados escuchando los latidos de mi corazón, sintiéndome abrazada en mi humanidad por hermanos del camino.
Hoy se que yo tengo la capacidad de maternar, de acompañar, de animar, alentar, crear, contener, mirar a los ojos, estar, acariciar y amar, he sido madre de mis hijos gatunos de cuatro patas, y también de mi madre en los últimos años de su vida con su larga enfermedad.
Se que se maternar con mucho amor a quienes se acercan para acompañarlos en sus procesos de búsqueda y crecimiento personal, y se que he aprendido a maternar a la persona más importante de mi vida, con quien estoy siempre, a mi misma.
Por ello hoy celebro los seres que como sea, forjamos nuestra capacidad de maternar ♥️
Gracias vida, gracias

Maria
20/10/19